miércoles, 15 de octubre de 2014

Soneto del día a día


Ya la locomotora avanza
por sobre rieles de carne
avanza y mancilla el cielo 
dejando un rastro azabache


De triste, vacua mirada
el tren sacrificios lleva
apretados mas que unidos
un solo grito se eleva


En un corazón obrero
ni una esperanza queda
los rodea el olor a muerte


y opio papel moneda
caminando hombro con hombro
como en un puño de seda.

No hay comentarios:

Publicar un comentario